El pasado viernes, 5 de diciembre, el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, presidió en la sede del MAPA una reunión de coordinación con las organizaciones agrarias y Cooperativas Agro-alimentarias de España para analizar la evolución del foco de peste porcina africana (PPA) detectado en Cerdanyola del Vallés. En representación del cooperativismo agroalimentario asistieron el presidente de Cooperativas Agro-alimentarias de España, Ángel Villafranca, y el presidente del Consejo Sectorial de Porcino Blanco, Manuel Esteve.
Durante el encuentro, los representantes de Cooperativas Agro-alimentarias de España insistieron en la necesidad de mantener la coordinación institucional y dar puesta inmediata a los ganaderos y las cooperativas afectadas que están dentro del perímetro de los 20 kilómetros. Recordaron al ministro, que el sector porcino cooperativo mantiene muchos puestos de trabajo en el medio rural y que es necesario estudiar líneas de ayudas para hacer frente a las repercusiones económicas que puede conllevar esta crisis.
El ministro subrayó la importancia de mantener una colaboración plena con el sector y garantizar la máxima transparencia en todas las fases del seguimiento. Destacó, además, que los esfuerzos se concentran en contener la enfermedad, impedir su expansión y asegurar la continuidad de los mercados internacionales de productos porcinos.
A lo largo del fin de semana se autorizó que los animales de la zona de vigilancia que alcancen el peso estipulado puedan salir hacia matadero con todas las garantías sanitarias, una medida avalada por la Comisión Europea y que se ajusta a los protocolos comunitarios. La PPA no afecta a la salud humana ni se transmite por el consumo de carne, cuyos productos cumplen todos los controles veterinarios y de seguridad alimentaria.
Ante el bloqueo temporal de algunos certificados de exportación en determinados mercados, el sector junto con la Interprofesional, INTERPORC, trabaja con el MAPA y la Comisión Europea para aplicar plenamente el principio de regionalización, con el fin de que las restricciones comerciales se limiten exclusivamente a la zona afectada y la actividad del resto del país continúe con normalidad.
El sector también valora positivamente que las autoridades hayan puesto en marcha una investigación exhaustiva y una auditoría independiente para esclarecer el origen del brote, y defiende que este proceso debe desarrollarse con rigor científico y sin especulaciones mientras avanza el trabajo técnico.
