- Las participantes identificaron algunas de las barreras específicas del sector agroalimentario que dificultan el avance de sus proyectos innovadores.
Durante los días 8 y 9 de abril, el Grupo Cooperativo Pastores y el CIHEAM Zaragoza han acogido la octava reunión del grupo español de mujeres emprendedoras rurales, enmarcada en el proyecto europeo GRASS CEILING. Este encuentro, correspondiente al ‘Living Lab’ español, volvió a evidenciar una realidad común a todos los países participantes: la persistencia de la brecha de género en el entorno rural y el sector agrario.
A pesar de su cualificación, de sus ideas innovadoras y de su decisiva aportación al desarrollo social y económico de sus comunidades, las mujeres emprendedoras en el medio rural siguen afrontando importantes obstáculos.
Innovación liderada por mujeres en territorios despoblados
El encuentro reunió a una veintena de personas, entre ellas ocho emprendedoras agroalimentarias procedentes de zonas despobladas de Aragón, Asturias y Castilla y León. Estas mujeres están implementando innovaciones en sus explotaciones que incluyen el uso de tecnología avanzada, digitalización de procesos administrativos y técnicos, y la incorporación de nuevos cultivos que favorecen la rotación y la sostenibilidad.
Lo que distingue su enfoque innovador es su dimensión social. Muchas de ellas subrayan la importancia de visibilizar a las mujeres del campo, fomentar redes de colaboración, y facilitar el acceso a la formación y la información. Algunas ya están impulsando este tipo de iniciativas, mientras que otras planean ponerlas en marcha próximamente.
Emprendimiento con conciencia ambiental y enfoque comunitario
Otro rasgo destacable del emprendimiento femenino en el entorno rural es su compromiso con el medio ambiente. Muchas están desarrollando productos sostenibles a partir de recursos locales, priorizando la venta directa al consumidor para reducir los costes asociados a las cadenas de distribución convencionales.
Durante el encuentro, se puso de manifiesto que las empresas lideradas por mujeres tienen un impacto positivo en sus comunidades. Sin embargo, siguen enfrentándose a estereotipos de género y a una falta de reconocimiento por su labor. Además, muchas señalaron la escasez de tiempo como una de las principales barreras personales para innovar, debido tanto a la carga de trabajo en las explotaciones como a sus responsabilidades familiares.
Barreras estructurales y desafíos específicos
Las participantes también identificaron barreras específicas del sector agroalimentario que dificultan el avance de sus proyectos innovadores. Entre ellas destacan los elevados costes de maquinaria e infraestructuras, así como los problemas estructurales del sector (mercados volátiles, altos costes de producción, estrictas normativas europeas), que hacen que los riesgos de innovar no siempre sean asumibles.
A esto se suma la falta de infraestructuras de telecomunicaciones y servicios básicos en muchas zonas rurales, así como una excesiva burocracia y normativas poco adaptadas a las realidades del campo.
Propuestas para avanzar hacia la equidad y el desarrollo rural
Durante las jornadas se debatieron posibles medidas de apoyo, tanto desde instituciones públicas como desde entidades privadas, con el fin de mejorar las condiciones de vida de las mujeres rurales y fomentar su incorporación al sector agrario. Estas propuestas se agruparon en cuatro grandes bloques:
- Apoyo personal para superar estereotipos y roles tradicionales
- Mejora de los servicios e infraestructuras en zonas rurales
- Medidas sectoriales específicas con perspectiva de género
- Cambios en la gobernanza y políticas agrarias actuales
Aspectos como la formación en técnicas innovadoras y sostenibles, el fomento del asociacionismo, el liderazgo femenino en la toma de decisiones, la corresponsabilidad familiar, y la dignificación del trabajo en el campo fueron temas centrales de debate durante estas dos jornadas de trabajo colaborativo.
¿Cómo contribuye GRASS CEILING a los objetivos de igualdad de género de la Unión Europea?
El proyecto europeo GRASS CEILING representa una aportación concreta y eficaz a las políticas de igualdad de género en el ámbito rural europeo. A través de su enfoque práctico, ha logrado identificar las desigualdades de género existentes en la agricultura y en las comunidades rurales de los distintos países de la UE, ofreciendo soluciones reales que enriquecen tanto las políticas agrarias como las de igualdad.
Basándose en un análisis riguroso y detallado, GRASS CEILING elabora recomendaciones dirigidas a mejorar la capacidad de la Comisión Europea para avanzar en su compromiso con la igualdad de género. Uno de los pilares de esta iniciativa son los ‘Living Labs’ o laboratorios de experiencias: espacios colaborativos que trabajan con mujeres rurales innovadoras, fomentan la creación de empleo en zonas remotas y fortalecen el papel de aquellas que ya lideran sus propios proyectos empresariales.
Un enfoque participativo centrado en las mujeres rurales
En el marco del proyecto, se ha trabajado de forma estrecha con mujeres de comunidades locales en nueve países europeos, con el objetivo de diseñar un modelo de apoyo integral. Este modelo facilita formación, acceso a recursos, mentoría y espacios de diálogo para que las participantes puedan compartir ideas, experiencias y propuestas.
Este enfoque participativo en la investigación y acción permite a las mujeres desarrollar nuevas iniciativas empresariales e impulsar transformaciones que refuercen el tejido económico y social de sus regiones.
Los laboratorios de experiencias de GRASS CEILING no solo son herramientas clave para el empoderamiento femenino, sino que también generan conocimiento útil y práctico. Además, proporcionan recursos valiosos tanto para las mujeres emprendedoras como para las entidades políticas y organizaciones de apoyo, tanto en los países participantes como en el conjunto de la Unión Europea.